viernes, 21 de febrero de 2014

Los reyes de la Kamanja: Ahmed Guerfti y Mohamed Laaroussi.


 Ahmed Guerfti ha fallecido en Tánger a los 89 años,
el 3 de Septiembre de 2013.

Mohamed Laaroussi fallece el 14 de febrero de 2014
en Fez, a la edad de 80 años.

En cuestión de cinco meses, dos grandes figuras y padres del fenómeno musical El "Jabliia Ayta" y la "taktouka Jabalia", nos han abandonado. Los dos están considerados como pilares de este arte popular y tradicional, dedicaron sus vidas a los fuegos de la pasión. Sus canciones constituyen una referencia para los investigadores del este arte que se extiende mayormente entre la regiones de Chefchaouen, Uazzán, Tánger y Tetuán.

Tenemos que estar tristes, todos, lo que ocurre es que, no todos lo estamos. Nada como hoy, para encabezar mi texto, con la pérdida de dos genios en cuestión de meses. Mi insaciable amor a la música y nutrirme de ella, me incitan a replantear grandes preguntas ante los pocos datos útiles que me faltan para entender al máximo sus experiencias y sus entregas, y pensar que pocos han logrado contarlo con todos los detalles. Se trata de dos estrellas y hace falta resolver una ecuación astronómica de orden celestial para profundizarse en sus legados. 

Yo necesito estar bien informado, últimamente una riada de datos y opiniones que se desbordan en Internet sobre, sus poesías dialectales, sus cantes desgarradores, sus reivindicaciones contra el colonialismo, sus bailarines travestidos con caftanes, sus llamamientos al trabajo en el campo, a sus corazones abiertos a la belleza femenina y por si eso no fuese suficiente, a sus llantos a la pérdida de nuestros seres queridos. 

Mira si estoy mal, dispuesto a pagar por ello, me siento y me doy cuenta de que los hemos perdido. Trato de dar mi punto de vista sobre lo sucedido pero no doy en el clavo y vuelvo a escuchar sus canciones, me ahogo en mí mismo, todo lo que cantan parece que ocurre demasiado cerca y lejos al mismo tiempo. Es mi historia, la de mis padres y la de mis abuelos. La verdad, es que me siento ignorante, incapaz de entender el valor de esta herencia. Algún día, me llegaran las explicaciones. Siento un dolor, un sufrimiento, que todavía, hoy no se me quita. Lo que me duele es sus ausencias y el hueco que han dejado en el patrimonio cultural marroquí, tenían un contrato  indefinido, han sabido interpretar nuestras vidas, consolar el mundo rural, alegrar nuestras bodas. Yo hablaré tantas veces hasta que se me quite el dolor. 

Por ahora, todos sabemos, lo que han dejado atrás, y todos sabemos que está fallando el enganche y la continuidad y que no debemos dejar atropellar por falsos imitadores, por cantantes de poca monta y por los folcloristas del turismo, hay que diferenciar entre un salir del paso y una tomadura de pelo.

El “Jabliia Ayta" y la "Taktouka Jabalia", son nuestro folclore, riqueza, arte popular y es nuestro patrimonio artístico y cultural. Uno, no puede reconocer su amor por Marruecos sin aclamar la salvación de este noble arte y no ver el riesgo eminente en su pérdida con el tiempo. Debemos preservarlo. La Unesco debe declarar el "Mawal Jabali" como patrimonio de la humanidad como hizo con el flamenco en 2010.

Muchos forasteros se han enamorado de este fenómeno musical. El músico Brion Gysin descubrió esta música gracias a Paul Bowles que lo invitó a Tánger, y consiguió que varios músicos participaran en varias grabaciones, como Ornette Coleman, Robert Plan, Peter Gabriel, The Rolling Stones...

Este artículo es un homenaje al patriotismo, a la entrega al arte, al espíritu creativo, a la contribución social, a la diversidad de la música y en definitiva al folclor marroquí. Yo  les prometo, a los dos, mantenerlos en  un lugar de gloria, entre los grandes maestros de la música. Marruecos, por lo tanto, debe estar orgulloso de estos dos artistas que habían enriquecido la memoria popular. 

Pertenecemos a Dios y a el hemos de volver.

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